HDMI, VGA, DVI, Thunderbolt… no solo hay un tipo de puerto para conectar el ordenador al monitor, sino que existen varios estándares en el mercado. Algunos más modernos y otros más limitados, diferentes resoluciones, velocidades de transferencia… son varias las cuestiones que entran en juego, por lo que en este artículo veremos los principales aspectos y tipos de conexiones más comunes.

Conectando nuestro monitor al ordenador o portátil

El primer paso que deberemos realizar a la hora de conectar nuestro PC al monitor es, lógicamente, ver qué tipo de puertos lleva. De nada sirve tener los dos dispositivos listos si no hay un cable que pueda ponerlos en contacto.

Ambos equipos no suelen ofrecer una sola opción, sino que normalmente cuentan con varios puertos. Entonces, ¿por cuál debemos decantarnos? Veamos cuáles son los principales tipos de conexión y sus características.

Principales tipos de cable o conexiones para monitor

A grandes rasgos, se pueden distinguir entre dos clases de conexiones, digitales y analógicas. Puertos exclusivamente analógicos cada vez quedan menos y el más común es el VGA. También existen opciones mixtas, como los DVI, y conectores totalmente digitales como el HDMI o el Thunderbolt. Estas son sus diferencias:

VGA

El puerto VGA (Video Graphics Array) es un clásico en los ordenadores y monitores desde hace décadas. Se trata de una conexión analógica que, en teoría, puede ofrecer resoluciones de hasta 1.920×1.080 píxeles, es decir, la conocida como full HD. No obstante, su concepción estaba pensada, sobre todo, para equipos con resoluciones menores, como la de 640×480 píxeles, por lo que pueden sufrir problemas a la hora de transmitir más datos.

Aunque se trata de una opción muy socorrida y siempre es recomendable tener cerca un cable VGA por su popularidad desde hace tiempo, este tipo de conexión ya se ha visto superada en características por otras alternativas que ofrecen más prestaciones.

DVI

El DVI (Digital Visual Interface, en inglés), resulta una opción mixta; es digital, pero también puede trabajar con señal analógica. De hecho, no solo hay un tipo de conexión DVI, sino que podemos encontrar el DVI-A (analógico), el DVI-D (digital) y el DVI-I (ambas señales). También es un puerto que ya tiene su recorrido, pero sigue siendo una alternativa más que aceptable en determinados casos.

En lo referente a especificaciones técnicas, según su enlace, simple o doble, puede ofrecer resoluciones full HD o de 2.560×1.600 píxeles, con tasas de refresco y de transferencia de 60 Hz y 3,96 Gbit/s, en el primer caso, y de 60 Hz y 7,92 Gbit/s, en el segundo.

HDMI

Se trata del estándar digital más habitual en estos momentos, sobre todo gracias a tu gran popularidad en los televisores. Además, este puerto no solo codifica el vídeo, sino que también envía el sonido.

Y, como sucede con el DVI, no solo hay un tipo de HDMI. De hecho, existen varios y los más habituales son los tipo A (el más conocido y grande), los tipo C, o mini, y los tipo D, o micro. Además, conforme ha pasado el tiempo desde su lanzamiento, en el año 2002, ha habido varias versiones. La última, la 2.1, admite resoluciones de hasta 10K (10.328 × 7.760 píxeles), con 60 FPS en 8K y hasta 120 FPS en el caso de una resolución 4K.

Display Port

Habitual en marcas como Apple, esta conexión resulta similar al HDMI, ya que codifica audio y vídeo, aunque no está tan extendido como este. De la misma forma, existen varias versiones para este tipo de puerto, alcanzando una resolución máxima de 8K a 60 Hz.

Thunderbolt

Su formato actual es el del cada vez más común USB-C, aunque se debe matizar que no todos los puertos USB-C son compatibles con este estándar, a pesar de que la clavija sea la misma. Se trata de una conexión habitual en portátiles y su resolución máxima es de 5K (5.120×2.880 píxeles) con una tasa de refresco de 60 Hz.

Usa adaptadores si las conexiones de tu monitor y PC no coinciden

Una vez visto los tipos de conectores para la pantalla del PC, ya sea de sobremesa o portátil, cabe preguntarse ¿son los que tengo en mi equipo? En el caso de que no coincidan los puertos del monitor y el ordenador, no todo está perdido, ya que existen adaptadores como, por ejemplo, de HDMI a DVI, que permitirán conectar ambos dispositivos sin problemas.

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